miércoles, 11 de noviembre de 2009

Si.

Si existen cosas realmente importantes.
Cuasífocles XI-XI-MMIX

miércoles, 28 de octubre de 2009

La puerta.


Si, ya sé, vuelvo a lo mismo, pero las circunstancias mandan, sobre todo si uno quiere sentirse sincero; en el más amplio espectro de la palabra. A veces pienso en hacer otro blog con el que nadie pueda asociarme, para no acojonar a mis amigos, pero sería una huida hacia atrás. Qué sentido tiene publicar tus pensamientos o tus sensaciones a los cuatro vientos, ninguno es la respuesta más cabal ¿No sentirse solo? Es posible, auto ayuda...es posible, miedo...quizás, cansancio...probable, absurdo...cierto.
Hoy me he levantado a las 6.30, cansado pero me apetecía mucho escuchar música. Apenas ha despuntado la primera luz, la sombra de un gorrión que picoteaba el cristal del ventano de la puerta, me recordaba que tengo que darles su ración diaria de pan mojado. Que listos son los jodios, he vuelto a pensar en voz alta. Hace mucho tiempo, que ya creía en que la libertad es vivir asumiendo riesgos, no el estereotipo de poder decir "lo que a uno le da la gana" -que inocencia, o que inconsciencia o...que ignorancia. El ciudadano civilizado, llámese europeo, occidental u otras variantes, es como uno de esos pájaros que picotean el pan; pero "protegido" dentro de una jaula. Sólo desde la perspectiva de una muerte cercana se abre una puerta en esos barrotes. Deja de importarte todo lo fútil y empiezan a aparecer ante ti las cosas realmente importantes, si es que existen, esa es otra.
Ayer pasaba la revisión semestral con mi admirada, profesional y crudamente sincera oncóloga.
Aquí no existe el "vuelta y vuelta", se sirve todo tal y como es. Es mi tercera consulta con ella.
-Sabes, cuando viniste la primera vez, según mi experiencia te daba unos meses de vida tal vez un año. Ahora te veo muchísimo mejor,"nos estamos librando por tablas" -me dice con mirada seria- pero... siendo positivos piensa que ese bulto (doloroso) bajo la tetilla derecha, va a ser de grasa que se ha inflamado un poco -yo ni pestañeo, ya sé que va a decir "biopsia"-...pero te voy a mandar una ecografía urgente con punción -no me equivocaba- Ya he pasado por dos. Tal y como entré salgo de la consulta. Sigo teniendo abierta la puerta de la jaula.

Cuasífocles XXVIII-X-MMIX

lunes, 19 de octubre de 2009

¿Hay algo más perverso que la hipocresía?


Si, hay cosas más perversas, pero dos o tres, no penséis que muchas más. Bueno si queréis pensar, pensad en que es la llave de la dominación...
Cuasífocles XIX-X-MMIX

jueves, 8 de octubre de 2009

Hijos de los perros.

Chantal Sébire.

Chantal Sébire ne voulait pas de vivre. Cet après-midi a été retrouvé mort à son domicile de Dijon (centre de la France), tel que rapporté par le Ministère français de l'Intérieur.
Il ya deux jours, la Haute Cour de Dijon a rejeté sa demande d'euthanasie active, elle a appliqué, souffrant d'un cancer incurable dans la cavité nasale, qui se propage vers le cerveau et lui causer un préjudice grave, comme un aveuglement progressif et la douleur sévère.
Cuando la realidad te atrapa, no me refiero a maltratada Chantal, hablo sobre mí; la desgana y la indolencia hacen mella en la voluntad. El cuerpo tiende a la inmovilidad, y la mente se desboca en vertiginosas espirales. La distancia que separa tu cuerpo de lo que te rodea deja de existir, ese escenario del que habitualmente eres espectador, te rodea amenazante, gira a tu alrededor cuando mueves la cabeza. Puedes cerrar los ojos pero no sirve para nada excepto para aterrorizarte aún más, desde esa oscuridad lo único que te puede pasar es que llores de rabia y de impotencia, no puedes hacer nada. Inocentemente suplicas clemencia ¿A quién? ¿A ti mismo? ¿A un dios? A nadie, estás solo, rodeado de perros que escupen saliva y te miran con los ojos desorbitados por el placer de verte así, muerto de miedo y de dolor. Pero no te muerden, sus dentelladas se quedan a un milímetro de tu carne, el chasquido de sus colmillos, hace que te orines encima. Manoteas torpemente intentando protegerte ¿De qué? Si no te hacen nada, sólo te rodean, siguen su instinto, es lógico siempre van a por el más débil, es la naturaleza ¡¡¡ Hijos de la gran puta!!! Gritas. No sirve para nada. Estarán ahí, hasta que te mueras.
Cuasífocles VIII-IX-MMIX

sábado, 26 de septiembre de 2009

viernes, 4 de septiembre de 2009

domingo, 9 de agosto de 2009

De repente, un optimista.

Korean War, Soldiers.

Con el debido respeto Leibnitz era un pánfilo, por no emplear el término que realmente tengo en la cabeza, que es bastante más insultante. Haré un ejercicio mental, imaginaré a un optimista como a alguien normal...no...no puedo, imposible disociarlo de una sutíl forma de la locura -si, ya sé, empiezo mal- intentaré explicarme. Del grupo de los optimistas, quitaré a los "temporales" osea: Enamorados, afortunados en el juego, herederos ricos por sorpresa y algún otro más; éstos no son optimistas, son felices momentáneamente. Ya quedan, con alguna impureza despreciable, los auténticos optimistas. Como para todo equilibrio, son necesarios, como lo son las sanadoras sanguijuelas o las delatoras ladillas. Me pregunto ¿ Porqué estoy escribiendo esto... ? Sin pensarlo mucho intuyo que es porque estoy cabreado, molesto, descontento conmigo mismo, por perder el tiempo meditando sobre semejante bazofia: Descorazonados y sonrientes optimistas, egocéntricos seres que cierran los ojos ante el dolor y la desgracia ajena, ante cuerpos desmembrados; que son capaces de sonreír ¡¡¡Durante todo el día!!! Restriegan por la cara de un desgraciado indigente esa dulzona sonrisa, pero son ajenos a ello. Son lo más parecido a un psicópata, aunque este último es un inocente, es un enfermo. Son "psicópatas sanos", dentro del sistema son muy útiles para los que manejan los verdaderos hilos de la gran máquina. Son la mano que deja caer la sanguijuela, sobre la hinchada, pestilente y negruzca pierna.

Cuasífocles (X-VIII-MMIX)

domingo, 26 de julio de 2009

¡ Uf ! Soy consciente, me quedan pocas neuronas.

A man with a broom (1881) - Vincent V.G.

Si amig@s, la presión vital que supone el umbral de la pobreza, la abundante cantidad de fármacos para mitigar el dolor y un nihilismo caduco pero que adorna, me llevan a escribir estupideces como lo de los palomos y una ocurrencia digna de un intelectual de derechas con varias copas de más.
¡ Diosss ! A quién se le ocurre confesar que es misógino aunque sea light. Pues a alguien bajo presión, con pocas luces y que en realidad es misántropo. Tiene que ser eso, si no la explicación es muy dudosa. Sí, el ser humano es... somos una plaga que se devora sin piedad, somos una enfermedad que utiliza desodorante y compresas anti-pérdidas de orina, mientras sonríe tomando un café, hablando de la insulsa vida sexual de los demás y de exculpantes obras benéficas . Es...imperdonable. Lo vamos a pasar mal, muuuy mal.

Cuasífocles. (XXVI-VII-MMIX)

domingo, 28 de junio de 2009

Ocurrencias

The Lost (David Jay Spyker)

Discípulo.- ¿Maestro cree en el alma?
Maestro.- Pues...-unos segundos de silencio- depende de cómo me pille el cuerpo.

Cuasífocles (XXVII-VI-MMIX)

sábado, 20 de junio de 2009

De palomas, palomos y humanos. (I)

Diógenes - Jean León Gérome (1860)

La aparente estupidez del título es real, pero con un poco de mano izquierda enseguida podemos encontrarle cierto sentido. En realidad la idea original era "De palomas palomos y hombres" pero no quiero singularizar, no sea que gran parte del "sector" feminista salga de inmediato del blog, ya que me interesa principalmente en esta entrada la atención de las mujeres ¿Por qué...?
Hablemos de palomas, la colombicultura es, aunque no lo parezca, un deporte con dos variantes principales: Deportivos y Mensajeras. Ambas se basan, aunque una más que otra, en la relación macho hembra. El deportivo es más sensible a la crítica feminista, ya que los machos compiten hasta la extenuación por estar lo más cerca posible de la "escurridiza" hembra. La mensajera es también cruel con el palomo ya que este, emparejado con una hembra, es separado de esta y se utiliza el celo del macho para que regrese lo antes posible al palomar, desde distancias que pueden superar los mil kilómetros.
A lo que iba, el hombre utiliza la naturaleza del cortejo y emparejamiento del palomo para su disfrute y entretenimiento. El "maltrato" del macho, uno confinado en un pequeño cajón en la soledad y oscuridad más absoluta, hasta la "suelta", y otro alejado cientos de kilómetros de su "amada" enloquecido por su temporal pérdida, es evidente, pero ¿Hasta que punto es real? ¿Y hasta que punto es extrapolable, al ser humano y al "Sistema"? Hummm...
Culpable o inocente, quizás debido a mi realismo-pesimismo, o inducido por el insensible Sistema, reconozco que soy un tanto misógino, que no machista no confundamos. También confieso la esquizofrénica devoción por las mujeres de mi familia. Continuo, el Sistema utiliza al hombre osea al palomo para su uso, en este caso el disfrute es inexistente, y a la paloma osea a la mujer, como una mera herramienta de control. La testosterona es el lado flojo del "palomo", y la otorrinomanía la de la "paloma", ambos lados flojos son la barrera que impide una verdadera comunicación entre los dos sexos. El palomo y la paloma están presos por su propia naturaleza y condenados a no entenderse realmente. Uno no sabe porqué mira el culo a cualquier mujer que se cruza en su camino, y la otra no sabe porqué no puede parar de hablar por teléfono. Y si no saben que hacer consigo mismos, cómo van a saber entender lo que el otro quiere decir. Los más extremistas optan por la vida monacal, los menos dotados por la pamplina, que deriva paulatinamente en violencia doméstica de diferentes grados, los inteligentes por un aséptico intercambio cultural y los más inteligentes por las miradas en silencio.

Cuasífocles (XXI-VI-MMIX)

martes, 2 de junio de 2009

El cuarto mundo. (y I I )

Muerte de Sardanápolo, 1827.( Eugéne Delacroix)

Conversación conmigo mismo la noche después de escribir "El cuarto mundo".
Bueno, bueno, no es para tanto, por qué escribes semejantes cosas...lo único que puedes conseguir es acojonar a tus amigos. Es verdad, mañana quito la entrada...no, no la quites lo mismo alguien deja de fumar, ja ja...no creo, además quienes me conocen saben que siempre bromeo un poco con esos asuntos...¡a quién se le puede ocurrir banalizar semejante situación! ¡A mí!... Lo haces sin mala intención...además están los que pensarán: ...menudo gilipollas, y las guerras... y los que no tienen morfina ¡qué!... y a mí que me importa lo que piense la gente, escribes lo que te da la gana y se acabó...pero hay que ser responsable...¡joer! no me hace efecto la pastilla... otra vez la maldita ansiedad... ya son las cuatro... ¡maldita sea!... un día más... tienes que inventarte algo para pasarlo...pasarlo para qué, si será igual que hoy, que mañana...te quejas de vicio, pero si tienes hasta internet...no tengo pilas para la radio...has vivido bastante ya, has disfrutado con la música, tu gran ilusión, recuerda los centenares de conciertos en los que has tocado...ya estamos con el pasado, eso es como un sueño...no te autoengañes, esta noche es lo único que es real...tienes que aguantar como sea, sonríe hasta el último día, hazlo por tu familia, que sufren contigo, por tus amigos que vienen a visitarte, te escriben e-mails, se preocupan por ti...¿no has dicho siempre que eras una persona realista?...pues ahora tienes la ocasión de demostrarlo...

Cuasífocles (II-VI-MMIX)

domingo, 31 de mayo de 2009

El cuarto mundo. ( I )

El violinista enfermo. 1886 (Cristóbal Rojas)

En el prefacio de este blog, dejo entrever que algunas cosas de las que se pueden leer aquí, posiblemente no sean demasiado agradables. Una mente medianamente aguda pensará "El que escribe es posible que esté deprimido" pues sí, entre otras cosas.
Servidor se encuentra en una situación, que los más optimistas calificarían de grave, cuento: Intentaré no extenderme demasiado, pues la cosa tiene guasa.
La primera en la frente, tengo un cáncer, óseo para ser más exacto. Llevo en el cuerpo dos operaciones de las llamadas de "gran cirugía", me reservo los padecimientos pre y post de las mismas, pero os puedo asegurar que jamás habría pensado que mi mente podría resistirlas, de hecho seguramente estaré un poco outside, pero no soy consciente, además llevo más de un año tomando morfina, que también te descoloca, imagino, aparte de producir fecalomas cuya sola escritura me pone los pelos de punta. Pero el fármaco alivia el dolor, un dolor profundo, lacerante, insistente, insoportable. Me han agujereado arterias, venas, músculos y huesos... me han llevado en una camilla corriendo por los pasillos del hospital, rabiando como un perro, hacia la unidad del dolor, minutos que son siglos. Se quitan las ganas de fumar ¿eh? Sobre todo si al de la cama de al lado en la UCI, le meten un aspirador por la tráquea para extraerle la mucosidad que le asfixia, os aseguro que el sonido del gorgoteo no se te olvida nunca. Admiro al personal médico vocacional, al que no le tiembla el pulso, realmente impresionan. Lo que impresiona de verdad es que en estos momentos, a mucha gente le esta pasando éso, y cosas mucho peores. Todo ello resulta cuasi anecdótico comparado con lo que sigue.
Lo peor de todo son las secuelas dentro de tu mente. Tengo que añadir a lo anteriormente expuesto, que llevo diez meses dentro de un hospital tras la última operación. Casi once meses como años. En el "centro", por llamarlo de alguna manera, en el que ahora me encuentro y cuyo nombre omitiré por respeto a los demás pacientes, languidezco junto a mis pensamientos. El sistema te arrincona como si no existieras, se limita a "echarte de comer" y te invita a presenciar la incompetencia de la mayoría del personal, cuando te curan las heridas y llagas que no cierran, debido a la cantidad de radiación que tienen tus células. Día tras día asisto a sesiones de rehabilitación, los fisios, de lo más competente del sitio, se esfuerzan con tus ateridos miembros, y siempre están hablando de deportes, como si quisieran quitarle hierro a la situación. Tengo que aclarar que esto es un centro para enfermos terminales mayormente. La muerte se pasea por los pasillos con naturalidad. El hospital es antiguo y siniestro, habrá unos ciento cincuenta enfermos, creo que yo soy el más joven (54 años) junto a uno que tiene sobre treinta que está tetrapléjico y no tiene familia, dan ganas de ir más despacio con el coche, no quiero ni pensarlo. Ya he tenido tres compañeros de habitación, el primero tenia noventa años y un cáncer galopante en la cara, murió al poco tiempo. Me cambiaron de habitación y un enfermero me dijo que a mi compañero de estancia le llamaban "El ángel de la muerte" ya que los últimos tres enfermos que habían estado en la cama que yo ahora ocupaba, habían muerto en muy poco espacio de tiempo; aquello me llevaba a meditar sobre el tema en las noches de insomnio, o en las que los desgarradores e insistentes gritos de dolor y angustia de algunos ancianos, me impiden dormir; a veces no sé porqué un sopor extraño me hace escucharlos como muy lejanos, otras me martirizan y pienso en como suicidarme cuando pueda. Un día entraron en la habitación los celadores y sin decir nada cogieron la cama del "Ángel", echaron sus pocas pertenencias sobre ella y se lo llevaron con total indiferencia ante sus airadas protestas. Al rato llego un anciano de 88 años y ocupó su lugar; está sordo como una tapia, al igual que el resto, menos yo que tengo un oído de búho. Por las mañanas pone la radio a todo volumen y mal sintonizada, alucinante, y por las tardes las telenovelas que atruenan mi cabeza, tengo que ponerme los auriculares con freejazz a todo volumen para conservar la cordura y no hacer un disparate. Debido a la generalizada sordera todo el mundo habla a gritos, me sacan de quicio, están consiguiendo que me vuelva loco, pero aguanto como puedo. Entre los gritos, Manolo Escobar a todo volumen y las enervantes rutinas, es complicado reconocerse a uno mismo. Intuyo que mi salud mental peligra y no sería una buena compañera para mi maltrecha salud física, vamos que puedo palmarla en breve. Esta enfermedad no concede treguas, es maligna, tan pronto te da un par de meses de vida, como te da esperanza y de repente despiadadamente te la quita. Ataca al cuerpo con crueldad y se ensaña con la mente. Observas como otros sufren tanto o más que tu, cuerpos destrozados, llenos de agujas, radiaciones, venenosas y agónicas quimioterapias, y esperas. Esperas que llegue tu turno de sufrir más aún o de morir. ¿Que porqué cuento ésto? Pues, porque son cosas que pasan.

Cuasífocles (I-VI-MMIX)

viernes, 15 de mayo de 2009

La esperanza es lo último que se pierde, pero se pierde.

The Day of the Dead (1859) (William-Adolphe Bouguereau)

Ah! Queridos amigos, el resbaladizo terreno de las emociones, la esperanza se mueve en esos territorios cuasi al alcance de la mano, pero ésta es como un gas osea, como una ilusión. Mi intuición me sugiere que cuando esa ilusión desaparece de tu mente, ya estás muerto, es sólo cuestión de tiempo tomar la decisión de quitarse de en medio y de un clic inesperado para llevarlo a cabo.

Cuasífocles XV-V-MMIX

jueves, 7 de mayo de 2009

Confusión

Arnold Böcklin (Autorretrato)

Lágrimas que resbalan lentamente,
camino por la ciudad,
la gente pasa junto a mí como ángeles sin alas,
apenas puedo pensar
sólo caminar
entre egos desconocidos.
El suelo es una pesadilla,
vuelo sobre ella,
manos de dedos gordos arrancan trozos de mi cuerpo
que vuelven a renacer con una textura gelatinosa.
La angustia es tal que deseo la muerte,
que todo termine,
pero no puedo morir,
intento arrancarme los ojos
noto como mis uñas se afilan
y penetran a través de mis párpados,
el dolor es insoportable,
tan grande que no puedo terminar el intento de cegarme,
sólo consigo desgarrar la blanda carne.
La sangre cae,
apenas puedo ver,
siento como algo roza mis piernas,
no sé qué es
sólo que no me deja correr,
escapar.
No puedo morir,
lloro sangre diluida por las lágrimas,
desamparado,
sin nada que me consuele;
me tumbo sobre la pesadilla,
me abandono me dejo hundir en ella
como un condenado a la mala suerte eterna,
al dolor eterno,
a la negación del conocimiento.

Cuasífocles
. VII-V-MMIX

viernes, 20 de marzo de 2009

La duda.

Gunther Von Hagens Creation.

De nuevo vuelvo a reaparecer al coger energía de no sé que sitio, quizá sea como el sediento que se arrastra sobre el achicharrante e infinito pedregal. Tan sediento y tan reseco que las alimañas lo confunden con un trozo de madera. Se mueve tan lentamente, que el absurdo revolotea sobre la aplastante lógica de la inmensidad del desierto, su cerebro le mantiene vivo y su autodefensa le proporciona alucinaciones más o menos entretenidas, como cuando de niño iba al cine de la mano de su madre, protectora incansable. Pero... no hay ninguna mano ni posibilidad de encontrar alguna, sólo me queda mirar las mías, otrora ágiles, ahora pacientes y expresivas, tal vez sábias. Para qué contar, por qué repetir lo que seguro ya han escrito miles antes que yo. No lo sé, pero el instinto me dice que es el miedo a la muerte, disfrazado de resignación-aceptación de lo irremediable. El no ser, sin cuestión que valga.
Cuasifocles. (XXVIII-III-MMIX)